22.7.13

El Hombre

Qué bello es el hombre con su imperfección, su soberbia, su miedo, con el torso engreído, la barba desdibujando al niño, su barbarie en la mesa, frente fruncida por el horror callado, ojos espiando tras la fortaleza, ¡qué hermosa bestia es el hombre! ay, mujer; ángel incomprensible que desea ser resuelta por un príncipe lampiño, pero el verdadero hombre, masculinidad, sudor, entereza alfa, convicción profunda, pasiones como el mar, como el aire, una tormenta contenida, el fuego ardiendo en sus manos cuarteadas, en sus tobillos inflexibles, la mancha de su voz que en lo grave del mi Sol se expande, la falta de coherencia y la necesidad de disfrazarlo con palabras, El Hombre, la almohada, el potro, el lince, el complejo acertijo de respuesta sencilla, impulso abrasivo destructor de la estructura, imán de plexos; mi espejo de Dios es Él.